La crisis es una situación que nos avisa que ha llegado el momento de hacer un cambio urgente en algo, es la hora de tomar una decisión, pero depende mucho de la actitud de la persona ante una circunstancia en particular. Para ver la oportunidad donde otros solo ven la adversidad es necesario observar la crisis desde otro punto de vista, para visualizarla con mayor perspectiva y con menor apasionamiento. Recordemos que todo tiene un lado negativo y un lado positivo, es una ley universal, pero la mayoría de los seres humanos solo ven el lado negativo porque no se necesita pensar mucho.
Sin duda el mercado español se encuentra en un estado cambiante donde la crisis afectará a todas aquellas personas y empresas que no sepan reaccionar a tiempo, pero esa misma crisis, sin duda, ayudará a lanzar negocios tan altos que de otra forma no se hubiese podido conseguir, el secreto. adaptarse.
Ahora más que nunca se debe abrir nuevos mercados, crear nuevas formas de negocio, mejorar la imagen de la empresa, el marketing o expandir su negocio. Y esto, desde el punto de vista del marketing estratégico, del branding y de la innovación también. Reducir este tipo de actividades fundamentandose en el gasto, supone tambien reducir oportunidades, la reflexión el trabajo en equipo y el conocimiento son las mejores inversiones que se pueden tener en época de crisis.
El marketing estratégico le ayudará, con honestidad, a velar por la mejora de los ingresos ,o al menos mantenerlos en estos difíciles tiempos, recuerde que es la construcción de valor a largo plazo. Generalmente las empresas dejan de hacer este tipo de acciones en épocas de gran incertidumbre “negativa”. Toda inversión puede esperar, pero sin inversión no hay crecimiento, en el caso del marketing, los indicadores que se utilizan poco relacionan lo que se hace con lo que se obtiene, ven esta área como un centro de costes antes que un generador de valor sin embargo el branding es a largo plazo, no siempre bajo el control de la empresa y en muchos casos, limitado a cuestiones de imagen pero es de un valor indiscutible.
La innovación tiene como característica cultural que los plazos se multiplican por ocho y con ello sus costes. Pero podemos aprovechar ese tiempo tan preciado que siempre echamos en falta para innovar, quizá lo tengamos más a mano, debido a la ralentización de algunas actividades. Poner los equipos de trabajo en situaciones creativas, innovando en productos, servicios y/o procesos, es la actuación que nos proporcionará mayores rendimientos una vez que la crisis vaya pasando. Puede ser desde modificar la oferta para ajustarla más a lo que las audiencias necesitan, hasta crear una nueva categoría. Innovar no es sólo inventar complicadas maquinitas ni introducir extrañísimas soluciones; innovar es, por encima de todo, mirar con una óptica nueva viejos problemas hasta encontrar la mejor solución posible.
Con respecto a todo esto, el Secretario General de ESADE nos pone sobre la mesa su propuesta sobre cómo una empresa puede “convertir la crisis en una oportunidad' en un resumen de 8 puntos:
1. La crisis es una gran oportunidad para generar cambios. ¿Qué cambios podemos afrontar que en otros momentos de bonanza parecen más difíciles?
2. Es el momento de mejorar en eficiencia. Esto puede implicar tomar decisiones de recortes en determinadas partidas.
3. Será clave potenciar los aspectos críticos en nuestra empresa. Puede ser incluso positivo invertir todavía más en los puntos estratégicos de nuestra empresa.
4. Vuelta de los valores a la gestión. Potenciar actitudes de más austeridad y valorar los directivos capaces de gestionar el actual cambio de ciclo económico.
5. Pueden aparecer nuevos mercados y nuevas oportunidades. El mundo se mueve, imposible quedarse quietos.
6. Habrá reestructuraciones en muchos sectores. ¿Cómo podemos mejorar nuestra posición de partida en un momento de mayor cambio en nuestro sector?
7. Aplicar principios de inversión prudentes. La figura del director financiero será un valor en alza dentro de la empresa.
8. Asumir la crisis como un hecho y plantearse la gestión en función de la siguiente pregunta: ¿Cuál será la posición de mi empresa después de la crisis?
Una última recomendación, invierta en su activo más valioso, su estado de ánimo, la dinámica de los negocios podrá ser más lenta y le podrá dejar un poco más de tiempo libre, úselo para lo realmente importante, trabaje desde su interior, estudie, descanse activamente, reúnase mas seguido con su familia, regrese a lo básico, encontrará muchas respuestas a preguntas que había olvidado. Haga lo contrario de lo que hace el resto, no espere resultados diferentes si sigue el mismo procedimiento.
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