El sistema económico basado en la máxima producción, el consumo, la explotación ilimitada de recursos y el beneficio como único criterio de la buena marcha económica es insostenible. Un planeta limitado no puede suministrar indefinidamente los recursos que esta explotación exigiría. Por esto se ha impuesto la idea de que hay que ir a un desarrollo real, que permita la mejora de las condiciones de vida, pero compatible con una explotación racional del planeta que cuide el ambiente. Es el llamado desarrollo sostenible.
Los beneficios y ventajas que conlleva aplicar estrategias de desarrollo sostenible van más allá de la mejora del medioambiente. El ahorro económico que pueden suponer estas medidas a largo plazo se presenta como una oportunidad que los empresarios deben aprovechar. Además está las distintas formas en que algunos emprendedores han sabido sacar provecho de este nuevo contexto. Tener una sociedad atractiva y respetuosa con el medio es algo crucial para sus tendencias económicas, como el sostenimiento del turismo y de la construcción.
En al campo energético, la situación está llevando a los países de la Unión Europea a mirar con creciente interés hacia los países que han sido capaces de alcanzar un rápido desarrollo de las energías renovables. La rapidez es importante porque depende de una conjunción de factores, desde los estímulos fiscales hasta la sensibilización social.
España será uno de los países más perjudicados por el cambio climático: para el año 2050, según el Hadley Center, habrá un aumento general de las temperaturas (unos 2,5 grados centígrados), más acusado en los veranos, las precipitaciones se reducirán en un 10 por ciento y la humedad del suelo en un 30 por ciento, y la práctica totalidad de los 3.000 kilómetros de playas desaparecerán, debido a la elevación del nivel del mar y a procesos erosivos. El cambio climático supondrá más incendios forestales, más erosión y desertificación, y más sequías, inundaciones y fenómenos tormentosos en el área mediterránea, como la llamada gota fría.
Sin embargo, España está en una posición inmejorable, gracias al protagonismo del sector energético español en el campo de las renovables. Las compañías españolas tienen una ventaja natural: la propia vulnerabilidad del clima español es la que crea las oportunidades para estas empresas. Sin embargo la industria general en España está por detrás en temas de cambio climático, lo que es sorprendente si se tiene en cuenta el impacto que puede tener.
En la construcción, el reciclaje de residuos de construcción y demolición es 'posible' desde el punto de vista ambiental y puede ser 'rentable' desde el punto de vista económico, según ha dicho hoy el gerente de Parque Verde, José Luis Martín Fandiño, que ha cifrado en el 96 por ciento de tasa de material reciclaje al final de 2008 sobre un total de 210.000 toneladas. Esta iniciativa pionera en España, donde hasta ahora la gestión de los residuos ha estado 'muy centralizada en el sector público', convierte a Parque Verde arrancó en la planta de reciclaje más importante de España, por capacidad, con posibilidad de tratar 600.000 toneladas.
En hostelería, el ecoturismo gana cada año gana más adeptos; el ecoturismo promueve la educación ambiental en tres dimensiones: los ecoturistas, personal del ecohotel o ecoalbergue y las comunidades locales. Asimismo, revaloriza el conocimiento tradicional y herencia cultural; permite mejorar la calidad de vida de las comunidades locales; asegura un flujo constante de ingresos para la investigación y conservación de la biodiversidad; e impulsa la economía local, fortaleciendo simultáneamente a otras actividades económicas como la agricultura, la elaboración de artesanías, textilería, entre otros. De esta manera, las empresas de ecoturismo tienen la oportunidad de generar mayores recursos para el financiamiento de la conservación de su principal activo, la naturaleza, aplicando estas herramientas financieras que le proporcionarán recursos sostenibles y de largo plazo.
La industria del turismo es la de mayor crecimiento en el mundo y además la que genera mayor empleo. Esta condición sumada a la característica de tener contacto directo con sus consumidores, coincidiendo en el espacio y tiempo la producción del servicio y el consumo del mismo, la convierten en una industria clave para difundir masivamente una cultura a favor de la protección del medio ambiente.
La sostenibilidad en la agricultura pasa por satisfacer las necesidades humanas cambiantes y conservar los recursos naturales se fundamenta en mantener la calidad de los recursos naturales y acrecentar la vitalidad de todo el agroecosistema que incluye desde los seres humanos, los cultivos y los animales hasta los organismos del suelo, es decir el equilibrio biológico. Los recursos locales se utilizan reduciendo al mínimo la pérdida de nutrientes, biomasa y energía y evitando la contaminación. La factibilidad económica de un modelo agrícola sostenible permite que los agricultores puedan producir lo necesario para su autosuficiencia y/o ingresos, así como ganar lo suficiente para que sea viable. Alrededor de la agricultura ya se han desarrollado nuevos mercados encaminados al desarrollo sostenible, abonos ecológicos, sistemas de riego más eficientes, etc.
Además de estos sectores, en otros ámbitos hay un mercado emergente que demanda productos respetuosos con el medio ambiente. Hay muchas posibilidades en el green marketing, desde la alimentación hasta la moda. Y, además hay que preguntarse qué sectores pueden ser vulnerables a los efectos de la naturaleza. Por ejemplo, Coca-Cola depende del acceso a un recurso cada vez más limitado, que es el agua. Se ha convertido en su prioridad. De hecho, es la única compañía que tiene un vicepresidente para Medio Ambiente y para Agua. Todo el mundo será más verde en los próximos años. Las empresas que lo entiendan, serán las ganadoras del futuro.
La conciencia ecológica y él consumo ético comienzan a jugar un rol protagónico en las estrategias de comunicación de las empresas. Las que no se adecúen a un tipo de negocio sustentable y socialmente responsables, a la larga, serán castigadas por los consumidores.
El movimiento verde también ha generado oportunidades de crecimiento para las empresas de software orientadas a la prestación de servicios. En ese sentido, la tecnología y los servicios de consultoría destinados a ayudar a las organizaciones a reducir sus viajes de negocios y, por tanto, a borrar las huellas de los combustibles fósiles aumentarán sustancialmente en los próximos años.
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