Según estudios de la Universidad de Navarra que han sido publicados en la revista científica Nutrition Metabolism and Cardiovascular Diseases expone que un alto consumo de yogur, al menos 7 unidades, se asocia con un menor riesgo de sobrepeso u obesidad.
Tomar un yogur diario puede contribuir positivamente a tu salud en general y ayuda a la prevención de enfermedades. Los yogures suelen contener bacterias vivas y activas que pueden beneficiar a tu sistema digestivo y fortalecer tu sistema inmunológico. Además, son una fuente de proteínas, calcio, y otros nutrientes importantes.
Sin embargo, es esencial considerar la calidad y los ingredientes del yogur que consumes. Optar por yogures naturales o griegos, bajos en azúcar y sin aditivos artificiales, es preferible. También, si tienes alguna intolerancia a la lactosa o alergia a los lácteos, es importante elegir alternativas lácteas o fermentadas que se ajusten a tus necesidades dietéticas
El consumo de yogur ha sido objeto de numerosos estudios debido a su potencial impacto en la salud. Algunos hallazgos sugieren que el yogur, especialmente aquellos que contienen cultivos probióticos, puede tener beneficios para la salud digestiva al mejorar la microbiota intestinal y la función del sistema inmunológico.
Además, se ha sugerido que el consumo regular de yogur puede estar asociado con un menor riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y la obesidad. Esto puede deberse a su contenido de proteínas, calcio, y otros nutrientes, así como a los efectos beneficiosos de los probióticos.
Por tanto, el yogur es considerado positivo para la salud por varias razones:
Probióticos: Muchos yogures contienen bacterias vivas y activas conocidas como probióticos. Estos microorganismos beneficiosos pueden ayudar a mantener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino, lo que puede mejorar la digestión, fortalecer el sistema inmunológico y contribuir a la salud general del tracto gastrointestinal.
Nutrientes: El yogur es una fuente de varios nutrientes importantes, incluyendo proteínas, calcio, vitamina D, riboflavina (vitamina B2), vitamina B12, potasio y magnesio. Estos nutrientes son esenciales para mantener la salud ósea, la función muscular, el metabolismo energético y otras funciones corporales.
Digestibilidad: La fermentación láctica que ocurre durante la producción de yogur puede ayudar a descomponer la lactosa, el azúcar natural presente en la leche, lo que hace que el yogur sea más fácil de digerir para las personas con intolerancia a la lactosa en comparación con la leche no fermentada.
Saciante: El yogur puede ser una opción saciante y satisfactoria debido a su contenido de proteínas y grasas saludables. Esto puede ayudar a controlar el apetito y reducir los antojos, lo que puede ser útil para mantener un peso saludable.
Versatilidad: El yogur es un alimento versátil que se puede disfrutar de muchas maneras. Puede ser consumido solo, mezclado con frutas, granola o miel, utilizado como base para batidos, salsas o aderezos, o incluso incorporado en recetas de cocina para agregar cremosidad y sabor
El yogur es comúnmente incluido en planes de nutrición y dietética debido a sus numerosos beneficios para la salud.
Incluir yogures en los planes de nutrición puede ser bastante versátil y se adapta muy bien a las necesidades y preferencias individuales de cada persona.
Se puede incorporar el yogur en planes de nutrición de manera saludable y equilibrada:
Como parte del desayuno: El yogur puede ser una excelente opción para el desayuno. Puedes disfrutarlo solo o mezclado con frutas frescas, granola sin azúcar, nueces o semillas. Esta combinación proporciona una buena dosis de proteínas, carbohidratos y grasas saludables para empezar el día con energía.
Como merienda: Una porción de yogur puede ser una merienda nutritiva y saciante. Puedes optar por yogur natural o griego, y agregarle un toque de miel, canela o frutas picadas para un poco de dulzura y sabor extra.
En batidos o smoothies: El yogur puede agregar cremosidad y valor nutricional a tus batidos o smoothies. Combínalo con frutas congeladas, espinacas, proteína en polvo, y un poco de líquido (leche, agua, o leche de origen vegetal) para obtener una bebida refrescante y nutritiva.
Como ingrediente en recetas: El yogur puede ser utilizado como ingrediente en diversas recetas, tanto dulces como saladas. Puedes usarlo para preparar aderezos para ensaladas, salsas para acompañar platos de carne o pescado, o incluso en la elaboración de postres saludables como muffins o panqueques.
En sustitución de ingredientes menos saludables: El yogur puede ser utilizado como alternativa más saludable en lugar de otros ingredientes menos nutritivos. Por ejemplo, puedes usar yogur natural en lugar de crema agria o mayonesa en tus recetas para reducir el contenido de grasa y aumentar el contenido de proteínas.
Algunas de las variedades de yogures que se pueden encontrar en el mercado son:
Yogur natural: Este es el tipo de yogur más básico, sin saborizantes ni edulcorantes añadidos. Puede ser entero, semidesnatado o desnatado, dependiendo del contenido de grasa de la leche utilizada en su producción.
Yogur con frutas: Son yogures que contienen trozos de fruta o puré de fruta. Suelen estar endulzados naturalmente con el azúcar presente en la fruta, aunque algunos también pueden contener aditivos de sabor o edulcorantes.
Yogur griego: Este tipo de yogur es más cremoso y espeso que el yogur tradicional, ya que se somete a un proceso adicional para eliminar parte del suero. Es rico en proteínas y tiene un sabor más intenso. Se puede consumir solo o mezclado con frutas y otros ingredientes.
Yogur de sabores: Son yogures a los que se les añade saborizantes artificiales o naturales, como vainilla, fresa, plátano, etc. Suelen ser populares entre los niños y aquellos que prefieren sabores más dulces.
Yogur ecológico: Cada vez más personas en España optan por productos lácteos ecológicos, incluyendo yogures. Estos yogures suelen estar elaborados con leche orgánica y pueden ser naturales o con sabor.
Yogur sin lactosa: Para personas con intolerancia a la lactosa, hay opciones de yogures sin lactosa disponibles en el mercado español. Estos yogures están elaborados con leche tratada para reducir o eliminar el contenido de lactosa.
Sigue Leyendo: