Los estudios de posgrado cada vez adquieren mayor peso entre la oferta académica de las universidades, en España se contabilizan en la actualidad 330 escuelas de negocios, que registran una evolución positiva en cuanto al número de estudiantes, debido al aumento de la demanda de formación por parte de profesionales y al éxito de los programas internacionales de los principales centros.
Uno de los principales motivos por los que cada vez más candidatos optan por complementar la formación universitaria con estudios de posgrado de máster es mejorar las perspectivas laborales, cursar un máster abre las puertas a un 5,2% más de las ofertas de empleo, además de que completa los estudios e Grado.
La oferta de títulos de máster es amplia y variada. Esto hace que elegir el más adecuado para cada uno no sea una tarea fácil. Además de los contenidos académicos en los que se centren los estudios, los candidatos a esta formación deben valorar otros criterios esenciales para que su elección final sea acertada y se ajuste de forma certera a sus necesidades, aspiraciones y, sobre todo, a su disponibilidad de tiempo de dedicación al trabajo y al estudio.
- Contenido del programa: la primera decisión que se debe tomar es el área de estudio que se desea abordar con el máster. Al margen del ámbito de conocimiento que más se adecúe a cada aspirante, también se deben estudiar con detenimiento las perspectivas reales de empleo que puede aportar la formación al currículum del candidato y la situación actual del sector laboral al que se dirige.
- Nivel de especialización: los programas generalistas, tipo MBA, se diseñan con frecuencia para los perfiles con experiencia laboral previa que aspiran a asumir cargos de gestión dentro de sus compañías y a aportar a su formación conocimientos en otras áreas empresariales. Los especializados son más recurrentes para los recién titulados que quieren centrar sus conocimientos en un ámbito determinado, para enfocar después su carrera laboral hacia un sector concreto.
- Duración del posgrado: tanto los máster oficiales como los programas que se imparten en las escuelas de negocios tienen una duración de uno a dos cursos académicos. Es evidente que la formación que se recibe en los programas más duraderos será más amplia y extensa y, en muchos casos, mejor valorada en el mercado laboral, pero también hay que evaluar el impacto que dos años de inactividad pueden tener en el futuro del estudiante.
- Métodos de estudio: trabajos en grupo, método del caso o un enfoque práctico son algunas de las características que definen muchos de los programas de máster, mientras que otros se centran más en el estudio individual y en la investigación. El candidato debe verificar que las técnicas de aprendizaje que se aplican en el curso se adaptan a su forma de trabajar habitual y que está capacitado para afrontarlo con éxito.
- Calidad del centro: varios ranking miden cada año la calidad de los máster que se imparten en centros de nuestro país y del extranjero. Estas clasificaciones pueden orientar al estudiante sobre cuáles son los programas mejor valorados en el entorno laboral y que, por tanto, proporcionan mejores perspectivas de empleo. Sin embargo, la valoración no debe quedar solo en estas listas. Es recomendable que, al elegir, el candidato evalúe otros aspectos de la universidad o centro en el que se desarrolla el programa, tales como la calidad del profesorado, el número de estudiantes que se admiten en el programa, si cuenta con bolsa de trabajo, la relación con el ámbito empresarial, las actividades extracurriculares, como charlas o conferencias de invitados de prestigio, o los servicios adicionales y recursos materiales que se facilitan a los estudiantes.
- Público o privado: elegir un centro público o privado para estudiar un máster está determinado en muchas ocasiones por el coste que implica el programa. Las escuelas de negocios y otros centros privados se sitúan con frecuencia en los primeros puestos de los ranking de calidad, pero los precios de los estudios (entre 18.000 y 70.000 euros) superan con creces a los de las instituciones públicas, que en sus programas oficiales deben aplicar las tasas públicas (entre 800 y 3.000 euros al año) establecidas para cada comunidad autónoma. Los estudiantes deben valorar el retorno de la inversión que hagan y comprobar los distintos sistemas de financiación y las ayudas y becas estatales o privadas a las que se pueden acoger para afrontar el gasto.
La modalidad del programa también es un factor decisivo, muchas universidades y la mayoría de las escuelas de negocios ofrecen a sus estudiantes de posgrado la posibilidad de conciliar la vida laboral y la formación con los programas denominados a tiempo parcial. Estos máster, a diferencia de los cursos de tiempo completo, que requieren dedicación exclusiva a los estudios, se imparten en general dos o tres días a la semana en horario vespertino o bien en turno de fin de semana: viernes por la tarde y sábados por la mañana.
La proliferación de cursos y masters a distancia u On line tienen una progresión imparable, esta modalidad multiplica infinitamente las posibilidades de impartir cursos, A distancia no hace falta la presencia física de los docentes y los costes en este sentido son mucho más reducidos. Tampoco hay ya un número adecuado de alumnos a los que impartir; en este caso elaborar unos contenidos y darles acceso por internet cuesta lo mismo para un alumno que para diez mil alumnos.
Probablemente los contenidos de un máster presencial y un máster a distancia sean análogos o incluso exactamente los mismos (de hecho hay entidades que imparten un mismo máster en ambas modalidades) pero hay matices que debemos valorar. Un porcentaje muy elevado de los alumnos que siguen un máster son nuevos titulados universitarios en busca de su primer empleo. En función de lo que ya comentamos anteriormente, se trata además en buena medida de titulados que aspiran a encontrar empleo en empresas. Un factor de suma importancia en lo concerniente a encontrar un puesto de trabajo, viene dado por las relaciones sociales: la magnitud y la calidad de nuestros contactos personales son muy importantes de cara a obtener un empleo. Cuando cursamos un máster presencial nos integramos en un grupo que tiene unas connotaciones análogas, intereses análogos, formación análoga... esto siempre puede aportarnos algo más.