Las posibles explicaciones se relacionan con la alta proporción de contratos temporales y las dificultades para encontrar el primer empleo después de completar la educación. Este nuevo informe proporciona apoyo para identificar y respaldar las políticas sociales y de empleo necesarias para abordar los desafíos que enfrentan los jóvenes en su búsqueda de independencia económica, especialmente en el contexto del empeoramiento de la situación socioeconómica como resultado de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
Los jóvenes menores de 30 años continúan enfrentando dificultades significativas al buscar empleo o encontrar trabajos que se ajusten a sus habilidades y experiencia. Aunque se espera que el desempleo juvenil disminuya en 2021, especialmente hacia finales de año, aún se mantiene un punto porcentual por encima de los niveles previos a la crisis en 2019. En cuanto a los jóvenes empleados, casi la mitad de ellos (45,9%) tienen contratos temporales, en comparación con uno de cada diez trabajadores en general (10,2%).
Incluso antes de la pandemia, los ingresos laborales de los jóvenes mostraban una mayor volatilidad en comparación con los trabajadores de mayor edad. Los hogares liderados por jóvenes experimentaron mayores niveles de pobreza, aunque se observaron diferencias significativas entre los distintos países de la Unión Europea. Los jóvenes enfrentaron dificultades para hacer frente a los gastos diarios, como facturas y alquileres, y alrededor del 61% de ellos expresaron preocupación por encontrar o mantener una vivienda adecuada en los próximos diez años.
Los jóvenes que han completado la educación secundaria tienen una probabilidad 19 puntos porcentuales menor de encontrarse en una situación en la que no trabajan, estudian ni reciben formación en comparación con aquellos que tienen un nivel educativo inferior. Por otro lado, aquellos jóvenes con educación terciaria tienen un riesgo 28 puntos porcentuales inferior. Además, los jóvenes provenientes de entornos desfavorecidos tienen aún menos probabilidades de estar trabajando, estudiando o recibiendo formación.
Las mujeres jóvenes en la Unión Europea, al comenzar sus carreras profesionales, tienen un salario promedio un 7,2% inferior al de sus colegas masculinos, y esta brecha salarial se acentúa a medida que avanzan en edad. A nivel general de la Unión, solo una pequeña parte de esta diferencia (0,5 puntos porcentuales) se explica por los logros educativos de las mujeres, su elección de profesión, experiencia laboral o el tipo de contrato de trabajo que poseen.
El estudio ESDE proporciona un análisis basado en datos sobre cómo abordar los desafíos que enfrentan los jóvenes. Específicamente, las políticas sociales y de empleo pueden:
La Unión Europea está en proceso de preparar nuevas iniciativas destinadas a ayudar a los jóvenes. En 2023, la Comisión tiene planeado revisar la Recomendación del Consejo sobre un marco de calidad para los períodos de prácticas, con un enfoque especial en las condiciones laborales. Actualmente, un grupo de alto nivel está estudiando formas de mejorar la protección social, incluyendo medidas dirigidas específicamente a los jóvenes, y se espera que presente sus conclusiones a principios del próximo año.
El Estudio Anual sobre la Evolución Social y del Empleo en Europa (ESDE) es el informe emblemático de la Comisión Europea que aborda temas relacionados con el empleo y los asuntos sociales. Proporciona análisis económicos actualizados y propuestas relacionadas.
La Unión Europea respalda a los jóvenes a través de varios programas, que incluyen:
La Garantía Juvenil, que incluye la Iniciativa de Empleo Juvenil. Estas iniciativas han tenido un impacto transformador en los mercados laborales de la Unión. Desde 2014, más de 36 millones de jóvenes que se han registrado en la Garantía Juvenil han recibido ofertas de empleo, educación continua, formación de aprendices o períodos de prácticas.
El Fondo Social Europeo Plus (FSE+) es el principal instrumento de la Unión Europea para invertir en las personas y también incluye apoyo para el empleo juvenil.
La iniciativa ALMA (Aim, Learn, Master, Achieve) se dirige a los jóvenes desfavorecidos que no trabajan, estudian ni reciben formación.
El Instrumento Europeo de Apoyo Temporal para Mitigar los Riesgos de Desempleo en una Emergencia (SURE) se lanzó en abril de 2020, con un valor de 100 000 millones de euros, para hacer frente al impacto de la pandemia en los mercados laborales de la Unión, incluyendo a los jóvenes. En 2020, brindó ayuda a aproximadamente 31 millones de personas y 2,5 millones de empresas. En 2021, brindó ayuda a alrededor de 3 millones de personas y 400 000 empresas.
Los Planes de Recuperación y Resiliencia de los Estados miembros de la Unión Europea se centran en políticas para la próxima generación, y uno de sus seis pilares está en línea con la Garantía Juvenil reforzada.
Fuente: ec.europa.eu
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