Hacer un MBA es una apuesta sobre seguro en muchos casos, apuesta que consigue abrir las puertas al mundo laboral, pero también abre una brecha a nivel económico. Por ello, las escuelas de negocios están adaptando sus programas para que su precio no sea desorbitado, y aún así sigan ofreciendo una excelente preparación. ¿Cómo lo consiguen? condensando los programas en un año.
A pesar de que los estudiantes que están solamente un año realizando el máster se pierden algunas de las ventajas de hacer un programa full-time, como por ejemplo las prácticas, como indican los decanos de universidades tan prestigiosas como Harvard o Wharton, en Europa está más extendida la modalidad de un año, quizá por la coyuntura socioeconómica o también porque quizá el perfil de alumnos de MBA en Europa sea diferente, siendo estudiantes más maduros, que ya están trabajando y optan por el máster como especialización y no tanto recién licenciados que aún no han tenido contacto con el mundo profesional y para los que es vital contar con la experiencia del máster full-time.
Sea como fuere, lo cierto es que los tiempos cambian y el escenario también, por lo que la educación superior ha de contar con estas nuevas situaciones y adaptarse a los tiempos que corren, ahorro y búsqueda de calidad no son incompatibles.
Sigue Leyendo: