En esta ocasión no nos inmiscuiremos en problemas ya conocidos sobre el tabaco como son los problemas al sistema respiratorio, o el riesgo de padecer cancer sin no que el tabaco también incurre en la visión del ser humano, ya que puede agudizar varias enfermedades oculares. En concreto, las más evidentes son las cataratas y la degeneración macular (DMAE).
La degeneración macular es la segunda causa de ceguera en personas mayores de 60 años en los países occidentales —solo por detras de la diabetes—, siendo el tabaco «el único factor de riesgo modificable» demostrado, asegura el doctor David Diamint en la publicación argentina «Rumbos».
Según explica el médico, fumar cigarrillos duplica el riesgo de contraer esta patología y el riesgo es mayor en base a la cantidad de cigarrillos fumados. El tabaco está relacionado con una serie de enfermedades oculares como por ejemplo las cataratas o la Degeneración Macular causada principalmente por la edad, pero que en el caso de los fumadores y ex-fumadores se puede ver acentuada, y aumentar el proceso de envejecimiento por lo cual se genera un desgaste ocular prematuro.
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En el caso de los diabéticos, el tabaco también puede acentuar los efectos que esta enfermedad tiene sobre la vista, ya que se pueden dar mayores daños en los vasos sanguíneos de la retina. La Pérdida Visual relacionada con el Nervio Óptico se da en pacientes que además de fumar tienen una dieta pobre en variedad y cantidad combinada además con la ingesta habitual de alcohol. A esto hay que añadir que se trata de una enfermedad que puede tener un origen genético. También, en pacientes con la Enfermedad de Graves, la adicción al tabaco puede acentuar la pérdida de visión.
Hay personas cuyo lagrimal no lubrica el ojo de forma regular, se dice que padecen de Ojo Seco. En estos casos el humo del tabaco provoca que el ojo se reseque aún más, se irrite, y lagrimeé de forma excesiva aunque no eficaz, dado que el lagrimal actúa como consecuencia de la irritación.
En definitiva, el tabaco también afecta negativamente sobre la visión, acentuando cualquier problema ocular que se pueda tener. Por ello, y como recomendaría cualquier especialista, si preguntas a tu médico oftalmólogo te dirá que la mejor decisión que puedes tomar es abandonar esta adicción.
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