Vivimos cada vez más en un mundo del Salvese quien pueda y tonto el último , donde pudiera parecer que solo nos interesa obtener la victoria sin importarnos el camino ,ni los obstáculos atravesados ni el tiempo invertido, ni las personas que nos hemos encontrado y que nos han ayudado para llegar a esta victoria . Este es, sin duda el éxito de la mediocridad que deja a un lado las complicaciones .
Si analizamos el libro “ Mediocracia, cuando los mediocres llegan al poder” de Alain Deneault, observamos como este filósofo profundizó en el concepto de la mediocridad al comparar el ser mediocre con un sandwich mixto. ¿Pero por que? se preguntarán muchos y es que según Deneault no hay una comida más básica que un sandwich de pan , jamón y queso pero que contente a más personas . Una comida mediocre que cumple a la perfección las espectativas.
Podríamos decir que el sándwich mixto es un plato sencillamente mediocre. No malo, ojo, me-dio-cre. Es decir, «de calidad media», según estricta definición de la RAE. «De poco mérito». Vamos, del montón.
¿Cual es el origien de la teoría del sandwich mixto?
Podemos datar el origen de esta teoría de la mediocracia en el siglo XIX , según el escrito de Alain Denault. Fue entonces cuando los oficios se transformaron en empleos. Llego el standar de trabajo y surgieron los departamentos de recursos humanos y con ellos las categorias : autónomos, empresarios, gerentes, emprendedores… pasando por todas las escalas que para Denault no tiene precedentes en la Historia moderna.
Y es que si nos fijamos en nuestro día a día , tenemos gente que produce alimentos en grades multinacionales sin saber cocinar, personas que te llaman por teléfono y te ofrecen tarifas, productos o servicios sin que ellos mismos entiendan muy bien que están vendiendo. Personas para las cuales el trabajo no es más que un mediocre medio de supervivencia.
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¿Hacia donde nos lleva la mediocridad?
La mediocridad se está expandiendo como un virus por nuestra sociedad. El oportunismo sin méritos se ha implantado en nuestra vida cotidiana cuando nos damos cuenta de que las cosas salen sin necesidad de esforzarse y los objetivos se van logrando sin llamar la atención, teniendo un perfil bajo y estando atento a los errores del resto.
No podemos catalogar a la mediocridad y decir si es buena o mala porque cada cual la vive de una manera distinta pero si podemos decir que nos habla de pasividad , de ley del menor esfuerzo, de falta de sacrificio … En un mundo donde no hay ganadores ni perdedores siendo lo importante participar. Ir avanzando sin ningún mérito, siendo un sandwinch mixto.
¿Como llegar a la excelencia ?
Las nuevas generaciones son completamente distintas a la generación de sus padres y más aún ahora con el resurgir de las redes sociales donde todo el mundo puede ganarse la vida a golpe de like sin preocuparse mucho de tener un buen curriculum , de estudiar y seguir formándose o de prepararse una entrevista de trabajo.
Una realidad distorsionada donde muchos piensan que es fácil vivir de las redes sin dedicarle tiempo , esfuerzo e inversión. Pero la excelencia de cada persona radica en tener la nevera llena de jamón y queso y trabajar para sacar un plato distinto cada día .
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Por suerte hay mucha gente aún con vocación de líder que va marcando la diferencia y gracias a los cuales podemos decidir si ser o no ser un sandwich mixto.
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