A raíz de la industralización de España, se torna complicado el retomar un crecimiento sostenible, sin embargo por medio de la inversión directa en sector del acero es un sector funcional.
La industria española vuelve a contar con un antiguo aliado, José María Aristrain, una de las grandes fortunas españolas y mundiales, que se ha hecho con el control de tres grandes empresas del acero, dedicadas a la fabricación de tubos.
Gracias a sus conocimientos se han dotado de los conocimientos para extraer lo máximo de sus fabricas, ahora se ha hecho con el 11% de Tubacex, una inversión cercana a los 19 millones de euros.
Arostrain pretende reindustrializar España, ya que la industria en España sigue marcando niveles mínimos, no sólo en comparación con otros países europeos, sino también en comparación con años anteriores. Desde 1972 el peso sobre el PIB español se ha desplomado del 39% al 15,9% según datos del INE.
Si la referencia es Eurostat la caída que estima entre 2008 y 2012 es del 30% y sitúa el peso de la industria en el 13,3% (descuenta energía) sobre PIB. Además, el organismo europeo advierte que la caída es la más grande de la Unión Europea tan sólo superada por Chipre y Grecia. Desde 1976 se han perdido más de 1,5 millones de empleos en el sector industrial.
Es importante dentro de España que casos como el enunciado para que de esta forma se sigan proyectando y acumulando, con el fin de generar una recuperación potencial dentro de la economía del país.