A partir del 2008 España pasa por una devaluación interna desigual, decayendo un 20% los sueldos de los trabajadores temporales.
La Comisión Europea critica la manera en la que Bruselas ha diseño del recorte de trabajadores españoles, en el cual mediante un informe realizado a nivel público este lunes, el Ejecutivo comunitario califica de “injusta, lenta e ineficiente” la bajada salarial que han sufrido, fundamentalmente, los empleados con contrato temporal. Según sus cifras, el ajuste salarial de los asalariados con esta modalidad de contrato acumula un 20% de caída en lo que va de crisis, frente a la reducción del 5% en el caso de los indefinidos. “Estos datos no sorprenden si se tiene en cuenta la posibilidad de renegociar [a la baja] el salario al término de los contratos de duración definida”, subraya.
Según el Gobierno de la UE los trabajadores con contrato temporal han sido doblemente penalizados: “Han sido expuestos a un mayor riesgo de despido y han sufrido una caída mayor en su salario”. Bruselas también incide en las diferencias temporales del ajuste. “La reducción salarial empezó antes y ha sido considerablemente más alta en el caso de los temporales”, asevera. La Comisión dibuja así una imagen de España que encaja a la perfección con la esbozada por el presidente del BCE, Mario Draghi, a principios de septiembre —'en algunos países los trabajadores entran al mercado laboral con sueldos de los años ochenta'—. En la publicación, los técnicos europeos se contradicen, sin embargo, al señalar que el ajuste salarial de los temporales “triplicó” al sufrido por los fijos cuando, a tenor de las cifras aportadas unas líneas antes, se habría cuadruplicado.
Sin embargo cabe destacar que la cualificación media de la fuerza laboral ha aumentado “el doble” en el grupo de trabajadores con contrato temporal que entre los indefinidos. Bruselas achaca este fenómeno, entre otros factores, a un patrón de decisión empresarial basado en el coste de despido —más bajo en el caso de los temporales— que penaliza el nivel de preparación técnica del trabajador y que propicia que los empleados con contrato fijo y mayor antigüedad sean los que acaben reteniendo su puesto de trabajo indistintamente de si son o no los más cualificados.
A pesar de ello es importante el mencionar lo que ocurre en la economía española, en la cual se destruyó 3,5 millones de puestos de trabajo y la tasa de desempleo pasó del 10% al 25%. Sin embargo para contrarrestar estos males Bruselas pretende frenarlo mediante una segunda reforma laboral que acabe con la dualidad en el mercado de trabajo. “A la luz de los resultados, la alta dualidad puede llevar a un proceso de ajuste ineficiente, que penalice desproporcionadamente a los trabajadores con contrato temporal”, subraya. En otras palabras: la UE pide, por enésima vez, que Madrid homogeneice definitivamente los niveles de cobertura de fijos y temporales.