Se empieza a promocionar los distintos vinos de España por medio de museos.
En conmemoración al 9 de noviembre el Día Europeo del Enoturismo, una iniciativa puesta en marcha por la Red Europea de Ciudades del Vino (Recevin) y que pretende dar visibilidad a un tipo de turismo muy centrado en la gastronomía y en las experiencias que se pueden vivir en un entorno rural. En España, el número de visitantes a las bodegas asociadas a la marca Rutas del Vino llegó a los 1,69 millones en 2013, según un informe de la Asociación Española de Cuidades del Vino . El dato supone un crecimiento del 18% con respecto al año anterior, cuando las estadísticas de Acevin contabilizaban más bodegas.
El vino también vive las diferentes estaciones tomando como mejores épocas al otoño y primavera, temporada clave para la promoción del enoturismo, enfatizando que el otoño es una época muy adecuada, puesto que es el momento de vendimia (la recolección de la uva) y las bodegas organizan actividades en torno al mismo. Incluso hay algunas que aprovechan al visitante para que le eche una mano en la recolección.
El atractivo de España para la mayoría de turistas extranjeros es su buen tiempo y las playas del litoral mediterráneo, junto con las Islas Canarias. Sin embargo, la riqueza gastronómica del país no se ha explotado convenientemente como forma de desestacionalizar el turismo y de dar vida a los destinos del interior. No sólo es vino o comida, sino también historia y cultura. El problema no es sólo de promoción, sino de adecuación de los destinos a las necesidades del turista internacional.
Además de esto el Enoturismo tiene varios atractivos que ofrecer como:
Bodegas y viñedos pintorescos: Las bodegas y viñedos españoles suelen estar ubicados en entornos naturales hermosos y pintorescos, como colinas, valles y montañas. Estos lugares ofrecen una experiencia visualmente impresionante, donde los visitantes pueden pasear entre los viñedos, aprender sobre el proceso de elaboración del vino y disfrutar de la belleza del paisaje.
Visitas guiadas y catas de vino: Las bodegas y viñedos españoles suelen ofrecer visitas guiadas donde se explica el proceso de elaboración del vino, desde la vendimia hasta el embotellado. También se organizan catas de vino, donde los visitantes tienen la oportunidad de degustar una amplia variedad de vinos y aprender sobre sus características y maridajes adecuados.
Gastronomía regional: El enoturismo en España está estrechamente relacionado con la gastronomía regional. Muchas bodegas ofrecen maridajes de vino con platos tradicionales de la zona, lo que permite a los visitantes disfrutar de una experiencia completa enológica y culinaria. La combinación de vinos españoles con platos como tapas, jamón ibérico, quesos y mariscos es una delicia para los amantes de la buena comida y el vino.
Eventos y festivales: Durante todo el año, se celebran eventos y festivales relacionados con el vino en diferentes regiones de España. Estos eventos incluyen ferias de vino, fiestas de la vendimia y catas temáticas. Participar en estos eventos es una excelente manera de sumergirse en la cultura del vino y disfrutar de un ambiente festivo y animado.
Historia y cultura vinícola: España tiene una rica historia y tradición vinícola que se remonta a siglos atrás. Muchas bodegas y viñedos tienen una larga historia y han sido transmitidos de generación en generación. Explorar la historia y la cultura vinícola española a través de visitas a bodegas y museos del vino es una experiencia enriquecedora para los amantes del vino y los entusiastas de la historia.