El Gobierno vasco ha aprobado una subida cercana al 25% en el precio de los másteres para acceder a la abogacía y a la docencia. Y los universitarios que repitan deberán pagar hasta un 30% más cara la matrícula.
El Departamento de Educación va a congelar prácticamente las primeras matrículas, aunque penalizará fuertemente a los estudiantes que repitan. En concreto, el curso que viene subirá en los grados un 0,4% el precio de la primera matrícula, un 15% en segunda convocatoria y un 30% en tercera convocatoria y sucesivas.
El Ejecutivo Urkullu ha aplicado la misma lógica al coste de los másteres. Y, por primera vez, se ha introducido una tasa especial en tercera matrícula que encarece el precio del crédito un 92% respecto a la primera y un 30% respecto a la segunda.
La peor parte en esta escalada de precios se la van a llevar los estudiantes que este año se han graduado en Magisterio y Derecho ya que el máster que deben cursar para poder ejercer sus respectivas profesiones será casi un 25% más caro, frente al 0,3% que subirá la mayoría de los másteres. También se aplicará el incremento del 15% común a todos los másteres en segunda convocatoria.
Protestas
Los universitarios han levantado su voz contra la política de tasas aplicada por Lakua “siempre con la complicidad del equipo rectoral” de la universidad pública. Ayer el colectivo de estudiantes Independienteak mostró su “incomprensión” y “rechazo” a los precios públicos de la enseñanza universitaria. Este grupo observa una contradicción en que el Gobierno vasco “sea tan beligerante en el discurso con Wert y sin embargo se escude en la ley del tasazo para la subir las matrículas”. Desde su punto de vista, esta ley no se puede aplicar por la falta de un sistema de contabilidad analítica.