Cada dia nos enfrentamos a situaciones en las que en menos o mayor medida debemos #hablarenpublico . El problema surge cuando nos crea un pánico que llega a paralizarnos.
Desde la escuela empezamos a hablar en público. Ahora con la reforma de la LOE, se le da además una mayor importancia a que los niños se expliquen delante de sus compañeros. Se fomenta desde infantil dándole una mayor importancia a los cursos de primaria creando exposiciones orales de los temas que van viendo.
Aún así en generaciones pasadas donde esta práctica se realizaba poco o nada se ha enfrentado directamente a hablar en público y sin miramientos. Previo a enfrentarse a esta situación en muchos casos los nervios del día de antes son incontrolables, perdiendo los datos de la exposición que uno bien sabe que está memorizada más que de sobra.
Esta situación se convierte en un momento estresante que además se diagnostica como fobia común para el resto de los mortales.
Os damos algún consejo para poder enfrentarse a ello:
Seguro que el tema te los has preparado a la perfección, aún así busca preguntas que te pudieran realizar y tenla lo más preparadas posibles. Te será fácil superar la situación.
Siempre está bien conocer el sitio previamente, aporta seguridad, pero sabemos que no siempre es posible. Prepárate un esquema simplificado en una tarjeta en la que puedas echar un vistazo si te quedas en blanco, esperamos que la necesites poco.
Practica tu presentación y si te grabas podrás ver donde realizar las pausas para no aburrir a los oyentes, tus muletillas puedes intentar corregirlas y si te es imposible busca sinónimos que puedan hacerla menos sonora.
#Serpositivo , en este caso como en la vida es importante la actitud. Todo va a salir bien y voy a tener éxito.
Si en la ponencia tienes pausas, por perder el hilo, busca respirar y quizás un trago de agua venga bien. No se va a notar.
En estas situaciones estos consejos básicos te pueden ayudar, si te sobrepasa el momento, busca ayuda médica, quizá él te pueda ayudar en casos extremos.