Genera consecuencias negativas el uso de las tecnologías 34% de los trabajadores.
Destacan tensión elevada, el bajo rendimiento, la fatiga y problemas familiares.
La mayoría de las personas en las sociedades de hoy en día utilizamos, tanto para nuestro trabajo como durante nuestro tiempo de ocio las TIC. Las TIC se han incorporado en la vida empresarial y laboral buscando mejorar su competitividad y productividad y se han incorporado también a nuestra vida personal no sólo para cuestiones de ocio sino como herramienta de búsqueda de información, empoderamiento y forma de relacionarnos. Sin embargo la incorporación de las TIC a nuestra vida en su sentido más amplio no se desarrolla igual en todas las personas. Las personas como usuarias de esas tecnologías, reaccionamos de modo diverso a las mismas, y esas reacciones a veces nos ayudan a mejorar y progresar, pero otras veces nos impiden un desarrollo ‘sano’ derivado del uso de la propia tecnología.
El ObservatorioPRL y la Universidad Jaume I ha realizado un estudio en el que han participado 855 personas de diferentes países (55,5% de España y resto de otros países de América Latina) y donde se ha querido conocer el uso que se hace de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) y sus consecuencias psicosociales y en especial sobre el tecnoestrés, referido al estrés específico derivado de la introducción y uso de nuevas tecnologías en el trabajo.
Más del 97% de las personas que participaron en el estudio usa las TICs para la realización de su trabajo.. Su uso no sólo tiene carácter laboral, sino que se ha extendido al ámbito académico y personal (más de un 73% hace uso de las TIC con fines lúdicos o de ocio y un 64% usan las TICs con fines académicos).
Problemas por exceso de uso
El 54,55% afirma utilizar continuamente las tecnologías
Un 34% de las personas que participaron consideran que el uso excesivo de las TIC les produce problemas o consecuencias negativas como el bajo rendimiento en el trabajo o estudio, tensión, fatiga visual, posturas inadecuadas, discusiones de pareja, no salir con sus amigos, etc.
En relación al factor psicosocial del contenido del trabajo, un 27,38% hace tareas rutinarias y un 51,58% considera que trabaja con mucha información y datos. En lo que respecta a los factores psicosociales de carga y ritmo de trabajo, un 31,87% confirma trabajar con plazos ajustados y un 24,79% trabajar contra reloj. Esto tiene especial relevancia cuando si consideramos el grado de implantación y uso en el ámbito laboral.
Preocupados por dar respuesta a las tecnologías de origen laboral
Las demandas laborales asociadas especialmente a la información y comunicación en las organizaciones se han incrementado y así se constata en el estudio ya que el 65% aseguran estar de acuerdo, muy de acuerdo o absolutamente de acuerdo en estar tan preocupados por dar respuesta a las tecnologías de origen laboral que olvidan sus asuntos personales.