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Estudios muestran que un tercio de los desempleados españoles no ha utilizado nunca Internet.

Un informe realizado por la Universidad Complutense de Madrid con la colaboración de la consultora Vinces muestra que uno de cada tres españoles en paro no ha usado nunca Internet y el 25% de éstos no ha hecho uso siquiera de un ordenador en algún momento de su vida.

El estudio “La eficacia del e-learning en la formación para el fomento del empleo” muestra como conclusión la necesidad de dotar de herramientas a las personas en paro, que puedan facilitarles el acceso al mercado laboral. Y es que en la sociedad actual la utilización y el manejo de Internet es sin duda una de ellas. La web ofrece, además de la posibilidad de buscar empleo, una amplia gama de formación que sirve, en varias ocasiones, para ampliar la validez del candidato.

Datos del INE muestran que las personas sin empleo tienen unas tasas de acceso a las TIC inferiores a las de uso por parte de los trabajadores en activo. El profesor Francesco D. Sandulli, encargado del departamento de Organización de Empresas de la Universidad Complutense de Madrid estima que esta exclusión digital de los desempleados le cuesta a la economía española 1.300 millones de euros. Dichos costes se encuentran relacionados con un mayor tiempo para hallar un empleo por parte de desempleados sin acceso a Internet ni a ordenadores y el coste de oportunidad derivado del impedimento para acceder a ciclos formativos ofertados por e-learning.

A pesar de que en los últimos tres años el número de actividades de e-learning en la empresa española se ha multiplicado por 2,5, no ha sido así en el colectivo de individuos en paro. La implementación de formación e-learning para desempleados en España está retrasada a comparación de algunos países europeos. En las economías más productivas de Europa, países nórdicos u Holanda, los desempleados utilizan más las TIC para realizar cursos de formación, lo que confirma la relación directa entre esta práctica y un mayor nivel de empleabilidad.

Por todo esto, y para ayudar en lo posible a los desempleados en la búsqueda de trabajo, desde la Universidad Complutense recomiendan intensificar el uso de Internet para reciclarse y mejorar la formación y las capacidades con cursos online.

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