Mezclando las tácticas neurocientíficas con el humor y el carisma, logran confundir y desconectar a sus espectadores, enseñando escenarios visualmente imposibles explicar.
Todos los trucos de magia, implican algún grado de engaño y muchas veces los espectadores son incapaces de pillar al mago. Los trucos utilizan principios neurocientíficos para modificar la percepción del cerebro de forma que el individuo no o puede controlar.
La teoría del movimiento explica que el cerebro no está diseñado para centrarse en dos cosas a la vez identifica una cosa importante y la destaca.
Los magos aprovechan esto y llevan la atención del público a un punto en concreto y hacen otras maniobras fuera del campo de visión y aprovechan el efecto de la no información brindando información falsa.
El cerebro es burlado por la disonancia cognitiva que le impulsa a racionalizar lo que sucede.
Otra de las debilidades que utilizan lo magos es la necesidad por la continuidad.
Entonces, la captura atenciones exógena hace que la mente se emocione al ver cosas nuevas, lo cual utilizan los magos para distraer y confundir al público sin darle tiempo a reaccionar.
También hay trucos que utilizan como el marco de memoria-predicción de la mente, a través del cual el cerebro deja de prestar atención si lo que ve ya ha ocurrido mas veces, ya piensa que va a ocurrir otra vez.
El carisma, el encanto y el humor de estos profesionales del engaño generan una liberación masiva de oxitocina en los cerebros de los espectadores, facilitando la credulidad, la cooperación y la unión.
Ser mago es mucho mas que aprender cuatro trucos con cuatro cartas para fiestas infantiles. Un verdadero mago hace una carrera deslumbrando a su público, y mejorando sus habilidades y su potencial.
Un mago cuanta con 7 partes:
-TRUCO SIMPLE DE CARTAS
-TRUCO DE ENGAÑO
-TRUCO SIMPLE CON UNA MONEDA
-ADQUIRIR MAS CONOCIMIENTOS
-MEJORAR LA PRESENTACION
-CONSEGUIR TRABAJO
-VIVIR LA VIDA