La formación presencial ha sido desbancada por la online, ¿a qué se debe este cambio en la tendencia? Sigue leyendo y te enterarás.
El panorama académico ha cambiado mucho desde los últimos tiempos. Atrás quedaron días de formación presencial siendo la tendencia actual más favorable a estudiar desde casa en horarios más flexibles escogidos por cada uno y acceder a programas que debido a la distancia geográfica nos resultaría imposible realizar, como por ejemplo hacer un máster en una universidad americana o estudiar en las más prestigiosas escuelas de negocios de Asia, por mencionar algunos casos.
Otra de las ventajas de la formación online es el ahorro; muchos programas presenciales son extremadamente caros, y además del coste de los propios estudios hay que sumarle manutención y estancia si se estudia fuera de casa, un gasto que puede hacer tambalear la economía del más pintado.
El tiempo de formación también se reduce al optar por la modalidad online; un máster online se puede finalizar en año y medio mientras que los presenciales suelen durar más tiempo.
¿ES TAN BUENO ESTUDIAR SIN VER LA CARA AL TUTOR?
A pesar de que las nuevas tecnologías han hecho que estemos a un paso el uno del otro, es cierto que para muchos ver al profesor cara a cara ayuda a afianzar el estudio, mientras que para otros no es necesario ver al profesor para continuar su rutina de estudio y su progreso.
En algunos casos, los programas combinan clases virtuales con algunas sesiones presenciales para que los alumnos saquen partido de las ventajas de los dos tipos de formación, haciendo de la experiencia de aprendizaje algo mucho más completo.