La Ley de Protección de Animales Domésticos tiene como objetivo el que los dueños de estos animales sean responsables.
Es un tema que produce mucho interés, pero del que hay muy poca información. Dependiendo de la comunidad autónoma en la que residamos, tendremos ordenanzas diferentes.
Los animales son seres que requieren derechos que los humanos debemos respetar. Esta indudable razón, común en toda España, es la que ha llevado a crear disposiciones para protegerlos.
El Consejo de Gobierno aprobó, la modificación de la Ley de Protección de Animales Domésticos, del año 1990, con el objetivo de adaptar el texto normativo a la realidad social actual.
Con esta modificación legislativa, se ajustan y clarifican las obligaciones del poseedor de animales domésticos a los estándares de cuidado y atención propios de la sociedad actual. La norma busca asegurar que los ciudadanos que posean un animal se responsabilicen de su tenencia.
Además de tener la obligación de identificar a su animal de compañía con un chip e impedir su reproducción incontrolada, los dueños tendrán tres días para comunicar a la administración el extravío, cambio o muerte de titularidad de su mascota.
Igual es el plazo para recogerlos en los centros de acogida tras haberlos extraviado, abonando los gastos causados por su recogida, cuidados y estancia veterinarios.
La Ley pretende también evitar cualquier tipo de sufrimiento de los animales y, para ello, prohíbe mantenerlos atados o encerrados en condiciones que generen un daño al animal.
Además de prohibir alimentar a animales abandonados, tampoco podrán exhibirse animales domésticos en locales de diversión.
También, estará prohibida la entrada de animales en zonas infantiles.
Respecto a los criaderos y puntos de venta de animales, se favorece la compra responsable de mascotas y se regula más exhaustivamente la venta.
La responsabilidad ante estos temas es cada día mas marcada ya que hemos puesto mucho empeño en concienciar a las personas que tienen animales domésticos en tener sus necesidades cubiertas y cuidarlos y quererlos desde el primer al último dia.
Los amantes de los nimales como puedn ser veterinarios o gente relacionada en ese mundo apoyan el tener animales en casa adaptados a esa manera de vivir, que no todos los animales pueden vivir en una casa, pero advierten que un animal o es un juguete es un ser vivo con necesidades que hay que cuidar y querer.