Al mundo digital le entendemos como contenidos digitales o redes sociales, pero que hay más allá del e-commerce y las redes sociales.
Las empresas del siglo XXI se rigen más por la teoría de Charles Darwin que por la teoría de los economistas clásicos, nos dirigimos a un mundo donde las empresas que mejor se adapten al entorno cambiante en que vivimos, serán las que sobrevivan. No van a ser las organizaciones más fuertes, ni van a ser las más grandes, serán las que mejor se adapten al cambio.
Hemos pasado de un mundo digital a un mundo exponencial, donde el driver principal es la tecnología, y la digitalización.
Nos enfrentamos a un mundo donde los cambios sociales, políticos y económicos son cambios lineales, sin embargo la tecnología cada día es más exponencial, la velocidad de cambio a la que nos enfrentamos es tremenda, esto nos genera grandes huecos que permite que aparezcan nuevas ideas de negocio, transformación de las compañías actuales, competencia entre modelos de negocio nativos digitales y modelos de negocio de la era pre-internet industrial.
Cómo competir en este hueco, como se comportan las compañías y como se adaptan las compañías en ese hueco lo debemos tener claro.
Nos enfrentamos a un mundo donde el software, literalmente se lo está comiendo todo (Marc Andreessen),
Un ejemplo es la música - se ha digitalizado, el software se está comiendo el proceso actual del negocio de la música, la derivada de esto es que lo que le ha pasado al sector de la música pasará al resto de sectores industriales por que el software poco a poco se lo va comiendo todo, donde el proceso de cambio se acelera.
Las empresas del siglo XXI se enfrentan a desafíos en el que deben pensar en como gestionar la innovación disrruptiva, sus impactos, como van a ser sus grandes matrices de cual va a ser su innovación core y su adyacente y su innovación incremental.
El mundo al que nos enfrentamos , no va a ser mejor por casualidad, sino que, cada uno de nosotros lo haremos mejor, si somos capaces de adaptarnos sistemáticamente al cambio que nos enfrentamos, debemos romper muchos paradigmas para esta adaptación, a saber de que este cambio será continuo.
Es decir, que todos vamos a tener la posibilidad de vivir un reciclaje continuo y sistemático.