UNA BUENA ATENCIÓN AL CLIENTE PREVIENE CONFLICTOS

Una buena atención al cliente significa ayuda, apoyo, satisfacer las necesidades, solucionar los problemas. En definitiva; prevenir

 El buen trato al cliente dice mucho de una empresa, y sobre todo del servicio que ofrece. ¿Cuantas veces no habéis pensado en volver a un hotel o restaurante, por el trato recibido? Efectivamente, es importante que nos guste el lugar, las instalaciones, el producto que nos ofrecen. Pero hay empresas que, si por algo nos conquistan/se distinguen, es por su excelente trato al cliente aunque también hay casos en los que la atención al cliente deja mucho que desear y por consiguiente no queremos ni oír hablar de ellos.

Los especialistas en el trato al público han de ser profesionales que reunan una serie de cualidades personales, algunas innatas y otras adquiridas, que consigan empatizar con el cliente, y saber cubrir sus necesidades. Hoy en día la mayoría de las gestiones con el cliente se desarrollan mediante formatos digitales, páginas webs o mediante atención telefónica. Desde aquí, queremos proponerte algunos aspectos que mejorarán tu servicio de atención al cliente, lo que atraerá sin duda  a más interesados y por ende optimizarás tus beneficios.

1) Facilita las cosas

A veces echamos de menos en una página Web un teléfono de atención al usuario o un email de contacto visible. Son pequeñas cosas a tener en cuenta que facilitan al cliente el contacto directo con la empresa y que, a su vez, un potencial cliente no abandone nuestro portal.

Un ejemplo novedoso es la atención a través de WhatsApp. Algunos hoteles por ejemplo, han empezado a utilizar esta aplicación como otra forma de contacto, recibiendo ya los primeros resultados positivos. Esta vía de comunicación además de gratuita es cómoda y ágil para el usuario, porque establece un canal abierto para interactuar.

2) Atención al cliente en todo momento

Antes. Incluso antes de conseguir que el cliente compre nuestro servicio, hay que esforzarse al máximo para lograr generar en primer lugar confianza, que el cliente nos conozca, vea lo que podemos hacer por su empresa o por él mismo y de ese modo decidirse por nosotros.

Durante. El cliente ha contratado, estupendo, sin embargo, no podemos olvidarnos ahora que hemos conseguido lo que queríamos. Podemos proporcionarle soporte si tiene algún problema técnico o bien asistencia para cualquier otra gestión, valiéndonos de diferentes herramientas entre las que podemos encontrar nuevamente la tecnología. Skype, Facebook, chats... cualquier opción es válida.

Después. Si el servicio que ha contratado el cliente es algo con fecha de fin, hay que preocuparse también por ver qué tal ha ido todo el proceso, si ha sentido respaldo por nuestra parte es más probable que vuelva a confiar en nosotros en el futuro.

3) Fidelización

Intrínsecamente ligada con la última fase del proceso de atención al cliente, un buen trato al cliente implica fidelización, el detalle, que dirían los más tradicionales; esa pequeña acción que marca la diferencia y que consigue que el cliente quede satisfecho y con un buen recuerdo: felicitaciones, buzones de sugerencias, etc.

Con todos estos pasos, lograremos crear una imagen positiva sobre nosotros y así poder evitar posibles conflictos por una mala gestión de nuestra parte. No siempre el cliente tiene razón, pero se le puede dejar satisfecho si solucionamos sus problemas, evitamos conflictos superiores y quedamos a su disposición para ayudarle cuando lo necesite. Tres pequeños pasos que harán que te recuerden.

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