¿Qué estudios se necesitan para ser Diseñador de Nuevos Modelos de Negocio Economía Colaborativa?

Funciones:

¿Alguna vez has viajado en Uber?

¿Has vendido un artículo que ya no utilizabas a través de Wallapop?

¿Tienes una cuenta de Netflix?

Enhorabuena: has utilizado modelos de economía colaborativa. 

Vivimos de manera diferente que hace veinte años. La digitalización de todo lo que nos rodea, el uso masivo de los móviles y sus aplicaciones, la comunicación a través de redes sociales: todos estos fenómenos han facilitado que, con el paso de los años, se hayan popularizado nuevos modelos de negocio que aúnan economía y tecnología: ¡compartir es vivir!

La economía colaborativa se caracteriza por compartir bienes, servicios o información entre usuarios a través de plataformas, normalmente online.

Es decir, no se posee algo en sí, no se compra un único objeto, sino que los modelos de economía colaborativa potencian la posibilidad de usar solo aquello que se necesita, porque los usuarios se organizan para conseguir su propio beneficio. 

Vamos a enumerar las principales ventajas de este tipo de modelos colaborativos: 

• La accesibilidad. La economía colaborativa normalmente se utiliza a través de apps o páginas web. Esto facilita muchísimo la interacción del usuario, ya que siempre va a tener su móvil a mano o un ordenador mediante el que acceder rápidamente a los productos. 

• Precios más bajos. Normalmente, los bienes y servicios que se ofertan con la economía colaborativa son más bajos que los de los competidores que utilizan modelos tradicionales. Al usuario le sale más rentable adquirir una prenda de segunda mano, reservar un transporte privado, compartir una cuenta en una plataforma audiovisual, etc. 

• Sostenibilidad. El carácter intrínseco de estos modelos económicos es la reutilización de recursos, lo que los convierte en economías mucho más sostenibles. Es decir: cuando compartimos un vehículo o reutilizamos un artículo, la producción de bienes de fábrica se ve reducida, lo cual promueve el ahorro de recursos y, en consecuencia, un mayor respeto hacia el medio ambiente. 

• Emprendimiento. Los modelos de economía colaborativa han permitido que muchos emprendedores se lancen a innovar en otros sectores. Muchas start-ups en la actualidad han surgido por la observación de exitosos modelos de economía colaborativa. 

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Requisitos y Estudios Necesarios:

En el diseño de nuevos negocios de economía colaborativa contribuyen especialistas de varios ámbitos: economistas, abogados especializados en derecho empresarial, en derecho internacional... 

Lo cierto es que la popularización de estos servicios, como hemos mencionado anteriormente, provoca que muchos emprendedores hayan querido lanzarse al amplio mar de las oportunidades de la economía colaborativa.

Esto genera la necesidad de contar con asesores o profesionales formados que puedan prestar sus servicios en la creación y diseño de estos nuevos e innovadores modelos de negocio.

Antes de lanzar un nuevo modelo económico basado en la colaboración, hay que prever su uso, su impacto, su inversión, realizar un balance de la situación, etc. 

Si cuentas con una licenciatura o grado en Derecho, algunas formaciones complementarias que pueden ayudarte para la creación de nuevos modelos de economía colaborativa son los siguientes: 

• Máster en Derecho Internacional de los Negocios

• Máster Universitario en Abogacía Internacional y Derecho de los Negocios Internacionales

• Máster en Derecho Internacional de Empresa

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Datos y Estadísticas:

Los nuevos modelos de economía colaborativa tienen sus luces y sombras.

Si bien son masivamente utilizados, su competencia "tradicional" mantiene una lucha constante con muchos de ellos buscando que exista una regulación de sus precios y servicios (a ninguno nos es desconocida la eterna lucha entre los taxistas y los VTC). 

Pero es innegable que estos modelos basados en la colaboración aportan numerosos beneficios, tanto en lo económico como en cuanto a innovación, respeto del medio ambiente o facilidad de utilización.

En el presente gráfico podemos observar una estadística que refleja el porqué los usuarios utilizan plataformas de economía colaborativa con mayor frecuencia. 

Teniendo en cuenta sus pros y sus contras, los futuros diseñadores de nuevos modelos de negocio colaborativos han de ir un paso por delante y analizar tanto los posibles problemas como los beneficios, facilitando un diálogo entre todas las partes implicadas para poder determinar cuáles podrían ser las mejores reglas del juego.

Y es que mirar para otro lado no serviría de nada: las nuevas tecnologías e Internet han creado una revolución tecnológica que ya no puede comprenderse sin las múltiples aplicaciones de la economía colaborativa. El nacimiento y consiguiente éxito de negocios tan conocidos como Airbnb, Uber, BlaBlaCar o Netflix genera no solo nuevas oportunidades de negocio, también riqueza y empleo.